Recupera el aspecto óptimo de tu cuerpo
Mezcla sémola con yogur fresco, y roza enérgicamente todo el cuerpo con la pasta resultante. Insiste en zonas como los talones y los codos. Acaba con una ducha de agua tibia.
Duchas estimulantes
Si te duches con agua fría, estimularás la circulación y evitarás congestiones. Refrescar el cuerpo atenúa la tensión arterial y nos relaja.
Rocia con frecuencia tu cuerpo, roza el agua de la piel con las manos en lugar de secarte y tarda unos minutos en vestirte.
Para después de hacer deporte
Prepárate una infusión de manzanilla muy concentrada, mezclada con algunas gotas de aceite de pino y de aceite de rosas. Añádela al agua del baño.
Los barros marinos
Son arcillosos y mantienen la temperatura del cuerpo. Si te haces masajes con determinados tipos de barro, especialmente atlánticos, conseguirás efectos beneficiosos para tu piel.
Para endurecer la carne
Coloca en un envase de vidrio hojas de rosas rojas hasta la mitad, después llena el recipiente con vinagre de manzana; déjalo macerar 15 días. Cuando lo uses, añade un rayo de este preparado al agua de la bañera y ponte adentro durante 20 o 30 minutos.
Nutre el cuerpo con vino
Si quieres proteger la piel de las agresiones ambientales, prueba la vinoterapia. Tanto la piel como las semillas de la uva eliminan las células muertas de la piel, al mismo tiempo que la pulpa la nutre y la humece. La primera fase del tratamiento es una exfoliación corporal con uva y la segunda, un baño en una tina.
La frescura de los vegetales se percibe a la piel
Los vegetales con un color verde intenso, los que poseen más cantidad de clorofila, mantienen a raya las bacterias que causan el mal olor corporal, incluido el mal aliento. Son las algas, el perejil, las espinacas, las acelgas, el brécol, la lechuga, los berros y los canónigos.