La estética es un tema que muchas personas se toman en serio (pudiendo influir en su forma de ser, de expresarse, etc.)
Si estamos pensando en realizarnos algún pequeño retoque estético en la cara, un aumento de pecho, o una liposucción, por ejemplo, tenemos que asegurarnos que nos pondremos en las manos adecuadas y no en las de un chapuzas que nos destroce la zona donde nos trate y probablemente nuestra autoestima.
No hace falta acudir a clínicas o cirujanos plásticos que aparecen en prensa continuamente (ya sea a nivel publicitario o porque se habla de ellos en algún programa). Siempre se ha dicho que los mejores sitios no necesitan publicidad, ya que se ganan la fama por su trabajo y no por un anuncio televisivo.
Sin embargo, con esto no quiero menospreciar el trabajo de aquellos centros o especialistas que se exponen al público de manera más comercial, ya que pueden ser igual de buenos o mejores que los que no lo hacen.
Una vez hemos pensado en quien va a ser el que nos va a operar, podemos obtener información de él a través de distintos sitios.
– Ver si es miembro de la SECPRE (Sociedad Española de Cirugía Plástica Reparadora y Estética). En ella encontramos profesionales que destacan por su buen trabajo y trayectoria. Para averiguar esto solo tenemos que dirigirnos a la web de la asociación y buscar si nuestro cirujano está.
– Si tiene página web (normalmente un profesional de esta área la tiene), mirar si ha escrito artículos, libros, o si ha participado en congresos y jornadas (esta información puede ser falsa, y gracias a internet nos puede ser muy fácil contrastarla).
– Ver en que hospitales o clínicas realiza las operaciones (es importante que este tipo de cirugías se realicen en centros adecuados).
– Buscar si hay artículos o referencias sobre él.
– Si no conocemos a nadie que se haya puesto en sus manos, chafardear en blogs de estética y belleza, ya que si se trata de un buen cirujano plástico habrán opiniones sobre su trabajo y podremos conocer la experiencia de personas que ya se han tratado con él (muchas veces, el resultado y la experiencia de otros es la mayor garantía que podemos tener).