Las mujeres de Asia son ampliamente conocidas por su belleza y porque generalmente se conservan estupendamente a lo largo de los años. Resulta muy improbable que adivinemos la edad de una mujer asiática de entre 25 y 40 años. Sin embargo, esta belleza no es siempre natural: muchas de ellas se realizan intervenciones estéticas tales como blefaroplastia, rinoplastia o aumento de pechos.
La más común, entre todas ellas, es la blefaroplastia. La presión mediática de los medios y de la publicidad occidentales también llega a países como Japón, China o Corea del Sur; es por este motivo que las jóvenes asiáticas quieren parecerse a las modelos y actrices occidentales que ven tan a menudo en televisión y carteles publicitarios; es por este motivo, de nuevo, que quieren someterse a una blefaroplastia.
Más del 50 por ciento de todas las personas asiáticas nace sin el pliegue del párpado superior, lo que otorga una acentuada imagen de ojos rasgados y pequeños. Por este motivo, se lleva a cabo la cirugía del párpado doble o blefaroplastia.
¿En qué consiste la blefaroplastia asiática?
Se trata de un procedimiento especializado que modifica el aspecto del párpado superior. Las asiáticas que se someten a este tratamiento lo hacen porque tienen un solo párpado superior que carece de pliegue, así que el objetivo es otorgarle uno.
Esta intervención es rápida y sencilla, y consiste en la extracción de una pequeña porción de exceso de piel, de tejido subcutáneo, y de una pequeña cantidad de depósitos de grasa. Se suele llevar a cabo como un tipo de cirugía ambulatoria, donde la mayoría de los pacientes vuelven a casa por su propio pie el mismo día del procedimiento.
Resultados de la intervención
Los primeros días posteriores a la blefaroplastia, el nuevo pliegue parece estar más arriba de lo esperado, pero, en cuestión de uno o dos meses, se acomoda donde el cirujano lo situó.
La zona tratada puede sufrir inflamaciones, decoloración y moratones aproximadamente una semana después de haberse sometido a la intervención, por lo que los pacientes deberán seguir los consejos del cirujano para minimizar los efectos secundarios y contribuir a una cicatrización rápida.